La neuropsicología es el área de la psicología científica que estudia y delimita las relaciones existentes entre la actividad del cerebro, las funciones cognitivas superiores y la conducta humana.

El prefijo neuro- (del griego neurón) significa nervio. Su uso en medicina es amplia ya que hace referencia al cerebro y por extensión a todo el sistema nervioso. Como ejemplos, neurona, neurotransmisor, neurocirujano o neurociencias. 

Sabemos bien que la neurología es la especialidad de la medicina que se encarga del estudio del desarrollo, funciones y patologías del sistema nervioso. Haciendo un somero repaso a éste recordaremos que el sistema nervioso humano se divide en:

  • Sistema nervioso central

Qué -como en todo los vertebrados- comprende:

  • Encéfalo, protegido por los huesos del cráneo, y formado por:
    • Cerebro
    • Cerebelo
    • Tallo cerebral, con tres partes
      • Mesencéfalo
      • Protuberancia anular
      • Bulbo raquídeo
    • Médula espinal, prolongación del encéfalo que se extiende por el interior de la columna vertebral.
  • Sistema nervioso periférico

Formado por los nervios craneales y espinales que emergen del sistema nervioso central y que recorren todo el cuerpo.

  • Los 12 pares de nervios craneales
  • Los 31 pares espinales

Desde un punto de vista funcional, el sistema nervioso, también puede clasificarse en una división más funcional que anatómica conforme con el papel que cumplen las diferentes vías neuronales, sin importar si recorren partes del sistema nervioso central o periférico:

  • Sistema nervioso somático

SNS: conecta los receptores sensitivos de los órganos sensoriales con el Sistema Nervioso Central, y éste con los músculos esqueléticos, los que se pueden mover conscientemente y responder a los cambios externos. Este sistema regula las funciones voluntarias en el organismo.

  • Sistema nervioso autónomo

También llamado sistema nervioso vegetativo está formado por el conjunto de neuronas que regulan las funciones involuntarias o inconscientes en el organismo (por ejemplo, la frecuencia cardíaca y respiratoria, la motilidad intestinal, la salivación, sudoración, la dilatación pupilar y la micción). Por tanto en esencial en el mantenimiento de la homeostasis fisiológica. 

Clásicamente se subdivide en dos subsistemas:

  • Sistema nervioso simpático
  • Sistema nervioso parasimpático.

Este breve repaso neurológico viene a cuento para explicar que una de las principales fuentes del conocimiento de la neuropsicología proviene del estudio de las funciones y las estructuras cerebrales, tanto preservadas como alteradas.

La neuropsicología es una disciplina y especialidad clínica, habitualmente ejercida por psicólogos especializados a tal fin, que estudia los efectos que una lesión o funcionamiento anormal de las estructuras del sistema nervioso central causan sobre los procesos cognitivos, psicológicos, emocionales y comportamentales.

Esta disciplina, es relativamente reciente, ya que sus bases se asientan en el siglo XIX con los estudios sobre la afasia (trastornos del lenguaje producto de una lesión cerebral). Hoy en día todo el mundo sabe que el sistema nerviosos y especialmente el cerebro es el órgano rector de nuestra vida, nuestro “ordenador central”, pero este conocimiento no se tenía en la antigüedad.

En el antiguo Egipto y también los filósofos griegos creían que el órgano rector de la vida era el corazón. Sin embargo, en el siglo VI a.C. surge la voz discordante del filósofo y médico Alcmeón de Crotona que dictamina que las funciones psíquicas residen en el cerebro, basándose en la observación clínica y en pruebas que le permitieron comprender que los órganos de los sentidos están unidos al cerebro a través de vías de comunicación, los nervios.

Sin embargo, la polémica entre el protagonismo del corazón y del cerebro como rector de nuestra vida intelectual duró casi dos mil años. Una vez aceptado el papel del sistema nervioso central, aparece el tema de la localización de las funciones en determinadas áreas del cerebro:

  • Thomas Willis, médico inglés del siglo XVII, fue una figura esencial de la anatomía, la fisiología y la neurología. Willis describió las estructuras cerebrales con una precisión sin precedentes. Asimismo fue uno de los primeros autores en atribuir a dichas estructuras funciones cognitivas precisas.

  • Teoría frenológica:

Consideraba que el carácter, los rasgos de personalidad e incluso las tendencias criminales de una persona podían ser estudiadas en función de la forma de la cabeza. Esta teoría, fue desarrollada por el fisiológo alemán Franz Joseph Gall en 1796, teniendo una gran aceptación en la primera mitad del siglo XIX. A pesar de su “excentricidad” influyó bastante en la moderna neurociencia. En nuestro país fue difundida por el lingüista Marià Cubí, del cual los barceloneses tendrán en mente su calle.

 

 

  • Critica a la frenología y estudios sobre la afasia:
    • El primer nombre a citar es el casi desconocido médico francés Marc Dax, que en 1836 describió un caso de parálisis en el hemicuerpo derecho, asociada a afasia, que relacionó con el daño cerebral producido por un accidente cerebro vascular en el hemisferio izquierdo.
    • El médico y antropólogo francés Pierre Paul Broca (1824-1880) describe en 1864 la localización del centro del lenguaje (conocida hoy como área de Broca, ubicada en la tercera circunvolución frontal del hemisferio izquierdo. La afasia de Broca se defina por la imposibilidad de conseguir una expresión verbal fluida, manteniéndose la comprensión mejor que la expresión.
    • En 1874 el médico alemán Carl Wernicke (1848-1905) describe el síndrome afásico que lleva su nombre y que para simplificar lo podríamos definir como opuesto al descrito por Broca. En la afasia de Wernicke la lesión se situa en la región témporo-parietal izquierda. En ella, la comprensión del lenguaje es lo más alterado, siendo la fluencia normal.

  • Luria y su aportación fundamental:

Ya en el siglo XX, el médico y psicólogo Alexander Luria (1902-1977) perfeccionó diversas técnicas para el estudio del comportamiento de individuos con lesiones del sistema nervioso. Diseñó y completó una betería de pruebas psicológicas encaminadas a establecer las afecciones en los procesos cognitivos: atención, memoria, lenguaje, funciones ejecutivas, praxias y gnosias. La obra de Luria se difundió tarde debido a la separación que se vivió entre los bloques durante la guerra fría, así como el escaso interés de las traducciones desde la lengua rusa.

  • La aportación de Karl Lashley:

Lashley fue un psicólogo conductista estadounidense, famoso por su contribución al estudio del aprendizaje y la memoria. Sin embargo, fracasó en encontrar una localización única de la memoria en el cerebro (que él denominaba “engrama”) por lo que postuló que el recuerdo no estaba localizado en una zona concretísima del cerebro, sino ampliamente distribuido a través del córtex.

Función de la neuropsicología

  1. En principio, una función diagnóstica, a través de baterías y pruebas diseñadas para determinar el rendimiento del sujeto en cada área o función cognitiva.
  2. Asimismo, la rehabilitación cognitiva, esto es, el diseño de estrategias para frenar, mejorar o paliar el deterioro cognitivo producido por una lesión cerebral. Rehabilitación en la que deben tenerse en cuenta aspectos individuales como los antecedentes, edad, rasgos de personalidad y red de apoyo.
  3. Investigación. Habitualmente comparando sujetos sanos con otras personas afectadas por daños o lesiones cerebrales. Los aspectos que se estudian en el campo de la neuropsicología son la memoria y sus componentes, la velocidad del procesamiento de la información, la capacidad de aprendizaje y las funciones ejecutivas.

Como colofón, me permito volver al prefijo neuro- que otorga cierto grado de “respetabilidad erudita” ya que se presupone su relación con las bases científicas del sistema nervioso… no obstante no siempre es así, ya que existen vocablos espurios con dicho prefijo utilizado sin ningún rigor.

La conjunción del ya referido prefijo neuro- con otras cosas, relacionadas o no entre sí, produjo la creación explosiva de numerosas disciplinas que desde finales del siglo XX, principalmente, permean los estudios sociales y naturales. Si fusionamos, por ejemplo, cualquier tecnología capaz de manipular el cerebro, entonces surge el extraño híbrido de neurotecnología; otra combinación es la de neuroeconomía (asociada al rentable y estratégico neuromarketing). Y si le añadimos un poco de todo tenemos la extraña mezcolanza que representa la PNL (programación neurolingüística) una pseudociencia que sin ningún rigor promete curarlo todo.